Hoy traigo en esta entrada el último trabajito con el que hemos estado entretenidos los últimos días. En realidad, el que lo ha hecho todo (que si no lo digo se enfada) ha sido Carlos, que es el que ha tenido la idea y la ha llevado a cabo. Las cosas como son, y por supuesto no me voy yo a llevar el mérito de esta tarea...
El tema, tal como digo en el título, se ha desarrollado justo en la entrada a nuestro recibidor. Ya en uno de los primeros posts que hice en el blog, hablé sobre cómo habíamos decorado el recibidor tratando de gastar el menor dinero posible y que quedase una entrada "resultona". Aquí se puede ver la explicación de la primera fase de nuestro invento.
En esta nueva parte del trabajo, hemos querido ocultar las tapas de electricidad que tan antiestéticas resultan. En su momento, cuando pinté la pared del recibidor, una de ellas la cubrí con la misma pintura, pero la otra no conseguí que cogiese la pintura. De esto hace ya unos cuantos de años y claro, yo aún no me había inmerso en el maravilloso mundo de los tuneos y bricolajes varios. Si ahora lo hubiese hecho de nuevo, lo habría solucionado dando una mano de imprimación a la tapa antes de pintar, pero en aquel entonces no lo hice.
El caso es que esta era la imagen que se veía justo cuando entrábamos en casa:
EL "ANTES" DEL RECIBIDOR |
Al mismo tiempo, desde hace mucho, estábamos con la idea de colgar en casa un cuadro que hice hace ya unos años y que hasta hace unos días había estado colgado en casa de mis padres. Estaba allí, pero desde que compramos la casa les dije que cuando consiguiese encontrar un sitio adecuado para ponerlo, me lo llevaría, porque es de los pocos cuadros que he pintado que me han gustado una vez terminado y le tengo un cariño especial. Después de muchos años viviendo aquí, por fin conseguimos encontrar un sitio que nos convenciese donde poder lucirlo. Y el sitio elegido ha sido nuestro recibidor. Por eso también podemos aplicarle el título del post: por fin ha sido bienvenido a casa.
Este es el cuadro que, 11 años después de ser pintado, por fin ha encontrado su sitio:
Lógicamente, con el cuadro sólo no podíamos tapar todas las tapas, así que tuvimos que idear algo que lo tapase todo. Después de varias ideas que no terminaban de convencernos, un día que estábamos dando nuestro habitual paseo por IKEA, como tantas otras veces, en Oportunidades encontramos la solución. Compramos 3 lamas de suelo de madera TUNDRA en color roble que tan sólo nos costaron 0,50€ cada una, así que por sólo 1,50€ teníamos resuelto nuestro problema.
LAMAS DE MADERA PARA SUELO |
El siguiente paso era montar estas lamas de madera sobre una base, así que como era algo que no se iba a ver, utilizamos un panel de madera de un palet que habían tirado en un contenedor. Aquí se ve el tablero en pleno proceso de montaje:
TABLERO TRASERO |
A continuación, había que enmarcar el cuadro, que en realidad estaba enmarcado, pero el marco que tenía no nos gustaba porque su estilo no era el que queríamos para casa. Así que hemos vuelto a enmarcar el cuadro, pero lo hemos hecho sin gastar ni un sólo euro. Para hacerlo hemos empleado unas lamas que hace unos meses nos habían sobrado de unas persianas venecianas que colocamos en el salón y, como tantas veces he dicho ya, como aquí no tiramos nada, siempre acabamos encontrando entre las cosas guardadas la solución a nuestras extravagantes ideas. Cortamos las lamas a la medida correcta y como eran de color abedul y así no iban a destacar en el cuadro, las pinté con spray de los chinos en color negro. Aquí se puede ver el color original y cómo quedaron después:
Esta es la imagen de cómo quedó el panel trasero de todo el invento, que fue el que usé para rociar con el spray las lamas de madera. Le hicimos una foto porque quedó curioso el dibujo:
ARTE ABSTRACTO NO PREMEDITADO |
Aquí está el cuadro preparado para ponerle su "marco":
EN PREPARACIÓN |
Y así quedó una vez enmarcado y puesto en su sitio:
CUADRO SOBRE PANEL DE MADERA |
Y por fin, así es como ha quedado, después de todo, este rinconcito de nuestra casa.
EL "AHORA" DEL RECIBIDOR |
Me gusta el hecho de que lo hayamos resuelto sin apenas haber gastado dinero, pero sobre todo, lo que más me gusta es que lo hemos hecho nosotros mismos con nuestras manos y nuestras ideas. De esta foto son nuestros el invento del panel para ocultar las tapas, el cuadro, el marco del propio cuadro, el adorno bola, que fue el que hice como "maqueta" de la lámpara de nuestro dormitorio y el bolso, que ya enseñé en una entrada anterior.
Ah, por cierto, el colgador de bolsos es el otro toque IKEA, que no podía faltar en el conjunto. Se trata de un perchero GRUNDTAL, que aunque se supone que es un accesorio de baño, nosotros lo hemos empleado para colgar mi bolso cuando entro en casa y las bolsas del cole de los niños.
Espero que os haya gustado esta nueva entrada (tanto del post como de casa).
Besos y hasta la próxima!
¡GENIAL!
ResponderEliminarMe gusta mucho como ha quedado. Digo yo que es de quita y pon ¿no?Pues si hace falta abrir las tapas de electricidad...Aunque como no entiendo...
Vamos lo que si os digo que el resultado me encanta y el cuadro es precioso "cuñá"
Besitos
Muy bien resuelto el problema, y además, con mucho estilo. pero lo que mas, es que unaobra de arte ha salido de un armario y como tu dices, ha encontrado su sitio.
ResponderEliminarLo digo porque yo tambien tengo cuadros y dibujos apilados, que no encuentran su lugar.
Felicidades de nuevo por éste trabajo.
Enhorabuena por vuestro trabajo, realmente estupendo¡¡¡
ResponderEliminarVaya cambio! Muy buen gusto! Y por el fín el cuadro ha encontrado su sitio. Es demasiado bonito para tenerlo en un armario. Ahí está genial!
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