Comienzo
hoy esta nueva sección que, como os
comentaba en la entrada de la semana
pasada, será una prolongación de la que ya inicié hace un par de años de Reinventando la Arquitectura.
Y
quiero comenzarla hablando de una marca detrás de la que se esconde una gran
profesional, pero al mismo tiempo, mejor persona. Se trata de Camilenas, nombre que seguro que muchos
conocéis ya si os soléis mover por estos mundillos de la artesanía.
Detrás
de Camilenas se encuentra Elena, su creadora y la única persona
que hay trabajando tras esta marca. El trabajo de Camilenas lo descubrí hace ya
muchos años, casi al principio de comenzar a meterme en este asunto de lo hecho
a mano. Creo que debe hacer ya casi 6 años que la descubrí. Como resultó que vivíamos relativamente cerca, un día quedamos para conocernos. Y desde entonces, ahí seguimos, contándonos nuestras alegrías y nuestras penas de lo que nos va sucediendo relacionado con este jaleo en el que nos hemos metido las dos :-D.
Los
inicios de Elena fueron muy parecidos a los míos. Ella comenzó haciendo
camisetas y complementos artesanales para su hija Paula, sacando ratitos de las horas libres que se buscaba después
de terminar su jornada laboral. Empezó con pequeñas aplicaciones para la ropa
que le compraba a Paula y comenzó también a hacer estas cosas para regalar a
los peques de sus amigos. A partir de ahí surgieron las “Muñequinombres”, como ella ha llamado a las camisetas decoradas
con muñequitos de fieltro que acompañaban al nombre del dueño de la prenda.
Aquí
os enseño algún ejemplo de este tipo de camisetas, que ya os digo por propia
experiencia que tienen un trabajo increíble…
Pero
si por algo Elena se ha hecho conocida en este mundo es por sus camisetas de muñecas recortables. Ahora
se pueden encontrar camisetas de este estilo en muchos más sitios, entre otras
cosas porque las telas empleadas se han comenzado a vender aquí en España y
resultan más accesibles. Pero cuando ella comenzó, lo hacía comprando las telas
fuera de nuestras fronteras, ya que aquí no había nada de este estilo (y si no
me equivoco, creo que aún sigue haciéndolo)
Os
dejo para que veáis una representación de sus camisetas de muñecas recortables,
que podréis imaginaros que me ha resultado especialmente difícil decidirme sólo
por unas cuantas, porque con tantas y tantas camisetas diferentes que ha hecho
a lo largo de todos estos años, ha sido tarea compleja:
Todas
sus prendas están realizadas con materiales de primerísima calidad y lo más
importante: con un cariño y una dedicación exclusiva en cada prenda que hace
que las convierte en verdaderas joyas.
Este
mimo con el que trabaja se aprecia en cada una de sus prendas. No me negaréis
que estos conjuntos que hace para las niñas más coquetas no son adorables:
Pero
además de las camisetas y los pantalones y faldas a juego, el mundo Camilenas
es mucho más amplio. Las más peques pueden ir aún más guapas y conjuntadas con
cualquiera de los complementos para el
pelo que realiza:
Elena
no sólo piensa en que llevemos a los niños guapos en los días de fiesta.
También al cole se puede ir con un
complemento Camilenas, como estas bolsitas
para el desayuno y mochilas:
Pero
no sólo los peques tienen cabida en Camilenas. Los modelos de camisetas que ya
os he enseñado antes son igualmente apropiados para las que ya no nos
encontramos en la más tierna infancia. E incluso tiene algún modelo que ha
realizado específicamente para adultos,
como estos que os enseño:
También
os podéis enamorar con estos bolsos
para las más mayores, en su mismo estilo de telas bonitas combinadas con
encajes, lazos y piquillos:
Pero
entre todas estas cosas que hace, a cual más bonita, he de confesaros que yo
sigo teniendo una especial predilección por la Ovejita Lunita, que queda realmente adorable en camisetas y
chalecos:
Yo
aún conservo la que me hizo Elena hace ya varios años, y de la que os hablé en esta entrada.
¿Y
qué más puedo deciros sobre Camilenas y Elena? Pues que, aunque en este
mundillo haya quien piense que todo aquel que hace un trabajo parecido al tuyo
es tu competencia directa y como se suele decir, “al enemigo, ni agua”, puedo asegurar que Elena es una gran compañera de la que he recibido
ayuda en muchas ocasiones del mismo modo que yo he intentado igualmente
ayudarle cada vez que ella lo ha necesitado para hacernos la vida más fácil en
todo lo relacionado con nuestro trabajo.
Así
que ya no me enrollo más y os invito a que visitéis Camilenas tanto en su página en Facebook como en su blog para que no os perdáis detalle de
todas las novedades con las que nos sorprende cada día más ;-)
Espero
que os haya gustado la entrada de hoy y el próximo lunes os hablaré de otra
artesana igualmente encantadora.
Besos
y hasta la próxima entrada.
Jolines...¡¡aquí me tienes con la lagrimita en el ojo después de leer esta entrada que me dedicas!!!
ResponderEliminar¿Qué puedo decir? Porque si digo que te aprecio muchísimo, que cuando te conocí no sólo encontré a una gran artesana y profesional sino a una bellísima persona en todos los aspectos, que admiro muchísimo tu trabajo, que siempre estás al pie del cañón cuando te necesitamos....si digo todo esto...lo mismo parece que te estoy haciendo la pelota...
Y para nada!!. Verdad verdadera todo lo he escrito sobre tí (y me quedo corta). Todas las que te conocemos sabemos la suerte que tenemos.
Así que muchísimas gracias a tí por el cariño que has puesto en esta publicación y por el tiempo que le has dedicado (te habrá llevado lo tuyo con el batiburrillo de cosas que tengo publicado jiji).
Pero sobre todo, GRACIAS por ser como eres Rocío.
¡¡Muchísimos besos!!!...
PD: lo de "al enemigo ni agua" nosotras tendríamos que reinventarlo diciendo "pero sí cafelito de Ikea con dulces! jijiji
¡Gracias a ti, Elena!
EliminarEn este tipo de entradas intento que se pueda llegar a conocer un poco mejor el alma del artesano que hay detrás de cada marca. Y cuando, como en este caso, tengo la suerte de poder conocer a la persona responsable, el escribir sobre ella resulta muchísimo más fácil.
La verdad es que este tipo de entradas me llevan mucho tiempo, mucho más que cualquier otra entrada de las que hago habitualmente enseñando mi trabajo, porque tengo que hacer la búsqueda de las imágenes y pensar muy bien cómo escribir el contenido para que pueda traspasar más allá de la pantalla el sentimiento que me producen estos trabajos. Pero la verdad es que al mismo tiempo me resulta muy gratificante, porque así puedo volver a ver y recordar estas cosas que tanto me gustan :-D
Y sobre el cafelito de Ikea no he hecho mención, se me ha pasado, pero vamos a tener que ir organizando el próximo, ¿no crees? ;-)