Hace
algunas semanas recibí un encargo de realizar tres acuarelas tomando como referencia tres obras de la artista Carmen Laffón. Esta artista tiene unas
obras espectaculares, en las que algunas de las características que más la
definen son la sutilidad de sus
pinceladas y el uso de colores en tonos
pasteles, que producen una gran
calma cuando se contemplan.
La
verdad es que este encargo está suponiendo un
gran reto para mí. Por una parte, el tratar de conseguir esa sensación de calma que transmiten las obras de Carmen
pero, por otro lado, el enfrentarme a un
tamaño para los cuadros a los que no estoy acostumbrada.
Normalmente
suelo pintar en tamaño A3 como máximo, pero en esta ocasión las acuarelas van a
medir 76x56cm, por lo que es casi 4
veces más el tamaño máximo en el que suelo pintar.
Por
eso, decidí que antes de ponerme con las acuarelas definitivas, tenía que hacer
unas pruebas para ver cómo
enfrentarme a ellas. Así que las he realizado primero en un tamaño más
asequible y hoy quería enseñaros estas muestras previas.
En
primer lugar, esta acuarela representa una imagen del Coto de Doñana visto desde Sanlúcar de Barrameda:
La
segunda acuarela es una imagen de unas salinas
en Sanlúcar:
Y
la última, es también una vista marina
de Sanlúcar:
Y aquí os dejo una foto de las tres muestras juntas:
Haciendo
estos bocetos he podido ir viendo qué cosas tendré que corregir en las láminas
definitivas y al mismo tiempo he podido comprobar cómo imágenes que a simple
vista parecen sencillas, en realidad son más difíciles de realizar que otras
que de entrada aparentan más dificultad. Y es que no todo el mundo puede tener
el arte de Carmen Laffón, ¿no os parece?