La
verdad es que no es normal que en estas fechas me encarguen detalles para hacer
un regalo a un maestro. Pero aunque
no sea lo habitual, alguna que otra vez me habéis pedido que haga alguna cosa
fuera de la temporada de fin de curso para ellos.
Y
esta vez se trata de una bonita historia
de agradecimiento. Os cuento un poco como surgió la cosa. Estrella, clienta ya habitual de Día
tras Día, quiso volver a contar conmigo para tener un bonito detalle con las maestras de sus hijos.
Y es que Estrella se trasladaba de
ciudad y antes de irse quería que las seños de sus peques tuvieran un
bonito recuerdo de ellos.
Fue
todo un poco loco, ya que quedaban
muy pocos días para que Estrella se trasladase de ciudad, así que nos tuvimos
que poner las pilas. Ella quería regalar a las maestras unas batas decoradas con el dibujo de Ro-ro
maestra, así que ella misma se encargó de buscar las batas y de hacérmelas
llegar para que me pusiera manos a la obra cuanto antes.
Siguiendo
sus indicaciones, hice los dibujos
personalizados de ambas seños. Y así es como resultaron las batas:
Como
habéis podido ver, y aquí os dejo algunas fotos donde se ve un poco mejor, las
batas llevaron unas bonitas dedicatorias
de parte de los peques, para que ellas sepan lo mucho que agradecen su labor
con ellos:
Y no podía irme sin enseñaros la foto de grupo:
¿Os
gusta cómo quedaron? A pesar de las prisas con la que las hicimos, yo creo que
quedaron muy bonitas. Y es que las cosas que se hacen desde el corazón siempre quedan bien, ¿no os parece?
Besos
y hasta la próxima entrada.